EDITORIAL | Autor: redacción | 27-12-2017
Acojamos al viejito
El represor Etchecolatz vivirá en Mar del Plata
El represor Etchecolatz cumplirá el resto de su condena, prisión de por vida, de forma domiciliaria en Mar del Plata. El represor, un viejito de 88 años, el preso más viejo del sistema penitenciario, inspiró la ternura del juez, que le concedió el beneficio para que pase, bajo la tutela de su mujer, sus últimos dÃas en una casa del Bosque de Peralta Ramos. Con tobillera electrónica, el ahora preso domiciliario, rememorará sus dÃas de torturador en libertad, cerca de nosotros. La democracia tiene estas ventajas, aquellas que el no le dio ni por asomo, a su larga lista de vÃctimas.
El represor Etchecolatz cumplirá el resto de su condena, prisión de por vida, de forma domiciliaria en Mar del Plata. La resolución fue firmada por el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N°6 que hizo lugar al pedido del abogado Carlos Ranuschio, quien además fijó como domicilio una casa en Nuevo Boulevard entre Guaraníes y Tobas, del Bosque Peralta Ramos. La tutela y guarda fue otorgada a la esposa de Etchecolatz, además de aplicarle el monitoreo electrónico por medio de algún dispositio de vigilancia”.
Rusachio interpuso un escrito en el que solicitaba por “la existencia de un delicado cuadro de salud por parte de Etchecolatz que amerita el otorgamiento del beneficio solicitado, ya que resulta claro que, más allá de la cronicidad de las patologías que padece el nombrado, con el transcurso del tiempo se ha venido presentando una situación de progresivo deterioro de su salud y estado clínico general”
El represor, un viejito de 88 años, el preso más viejo del sistema penitenciario, inspiró la ternura del juez, que le concedió el beneficio para que pase, bajo la tutela de su mujer, sus últimos días en una casa del Bosque de Peralta Ramos. Así, la democracia pone en carrera, por razones humanitarias, a uno de los mounstros más deleznable de la última dictadura. Derechos humanos para todos, incluso para quien siempre los violó,