EDITORIAL | Autor: Redacción | 03-07-2013
Don Hipólito
El ninguneado de la historia actual
Un día como hoy moría Don Hipólito Yrigoyen. Había nacido en Buenos Aires el 12 de julio de 1852, es decir, cuando los pactos y los caudillos se debatían entre el orden nacional y el poderío local. Recorrió buena parte de su historia luchando por los derechos civiles de la población. La letra de la “Marchita Radical” lo inmortaliza para los jóvenes. El pueblo radical lo recordará de por vida. Sin ser en el fundador del Partido Radical, fue él quien le dio vuelo llegando a ser dos veces presidente de nuestro país.
Presidente de la Nación Argentina en dos mandatos (1916-1922 y 1928-1930) y figura relevante de la Unión Cívica Radical. Fue el primer presidente de la historia argentina en ser elegido por sufragio universal masculino y secreto. Solitario y nostálgico, enigmático y austero: con gran sentido del deber. Luchador y revolucionario. Participó activamente en la Revolución de 1890 y en la de 1893. En la primera era candidato a jefe de policía, en caso de triunfar la revolución; en la segunda organizó, condujo y financió un ejército radical de 8.000 hombres. Fue uno de los fundadores, siguiendo a su tío (Leandro N. Alem) y a Aristóbulo del Valle.
En estos días de julio nuestro país tiene muchos aniversarios: la muerte de Perón, la de Don Hipólito, el cumpleaños de Menem y, por supuesto, nuestra declaración de la Independencia allá por 1816. Sin entrar en polémicas sería bueno recordar cómo vivió, como se condujo y como murió nuestro querido Don Hipólito, que precedió en la historia y en los principios al movimiento de masas populares que impulsó Perón y de cuyas consecuencias aún hoy seguimos irreconciliados.
El día en que los medios hegemónicos van a tratar de adueñarse del caudillo, y el oficialismo va a procurar ponerlo en un costado, nos gustaría desde OPI22 honrar la memoria de este ciudadano al que le debemos un trozo importante de lo que somos. Lo que vanos a "ningunear" desde esta tribuna, en todo caso, es la polémica en sí misma.