EDITORIAL | Autor: Lic. José Luis Dranuta | 29-08-2013
Como si (perdón por las palabras)
Seguridad
Es como si viviésemos en una ciudad, pero no. Tenemos policÃa, pero no puede actuar, no sabe o no quiere. Tenemos un gobierno provincial que se declara prescindente de las decisiones del gobierno municipal: básicamente el gobernador y el intendente se pueden reunir para sacarse fotos en el CEMA o en el MAC pero no pueden solucionarnos la vida (sà la permanencia en este plano existencial) a ninguno de nosotros. Todos podemos ser Luis Aguirre, entrando desprevenidos a cualquier comercio de la ciudad, y morirnos de un balazo a manos de un hijo de puta sin escrúpulos.
Todos menos ellos, que cuando se mueven llevan una caravana de escoltas y seguridad, como si se tratase de los nuevos Ricardo Fort de esta urbe. La diferencia es que Ricky se paga su seguridad con los chocolates. Ahora nos dicen que vienen los gendarmes para cuidarnos. Que se yo, si no fuera porque se trata de mi vida me cagaría literalmente de risa.
En otro tiempo, en otro mundo, en otra realidad, Luis Aguirre de 41 años hoy tendría su vida: simplemente eso, y tal vez dentro de otros 41 años se muriese por causas naturales. El mismo día que nos enteramos que un guardia se quedó dormido y un violador condenado a 40 años se escapó es de esperar que si agarran al asesino de Luis lo hagan purgar unos 25 minutos de condena: a lo sumo una hora. Hasta que el próximo ineficiente o corrupto le permita salir alegremente para que todo siga girando como si fuese una gran ruleta rusa. Pero la noticia es que gendarmes estarán cuidándonos y la Municipalidad se hará cargo de los gastos de alojamiento. En definitiva, es como si usted me entendiera lo que quiero decir.
