EDITORIAL | Autor: Lic. José Luis Dranuta | 12-09-2013
Lo barato sale caro
2014: objetivo cumplido… pero falta el 2013
Como nuestro paÃs late al ritmo del fútbol podemos decir que llegar a Brasil 2014 es un objetivo que todos de alguna manera nos habÃamos propuesto: hoy ya es una realidad. Octubre de 2013 es un objetivo para una parte importante de nuestra sociedad, que se enteró de lo de Brasil 2014 pero que está enfocada en cosas más de acá, más mundanas.
El país se debate en encrucijadas diarias de inseguridad, devaluación no consentida, diálogo político forzado y un cúmulo de medidas tomadas por el gobierno desde el revés reciente en las PASO a la fecha. Por nombrar algunas de esas medidas, no más, digamos que la suba del mínimo imponible de ganancias, tantas veces reclamada por la CGT, la suba de las asignaciones, la maratónica gira de inauguraciones de obra y la suba de los mínimos en el monotributo tiende a generar una situación de alivio en la clase media y las clases más bajas.
Si consideramos que históricamente los argentinos somos de darle bola al bolsillo como principio rector de nuestra moral, no es de extrañar que el gobierno nos quiera endulzar el bolsillo con el objetivo de que votemos “un poquito mejor en octubre” de lo que lo hicimos en agosto.
Lo malo de este razonamiento es que queda la sensación de que nos están comprando: y por poco. Entonces, si nos vendemos por poco precio es que somos baratos. O, en todo caso y por ley de oferta y demanda, sobramos (no escaseamos).
Las reglas populares de la vida son universales. Existe una que dice “lo barato sale caro”. Nadie de los que diseñó y asesoró a la presidenta por estos días le debe llevar el apunte a las reglas populares: seguramente estarán como autistas mirándose el ombligo, cosa que fue una característica marcada del sector ganador de la década ganada. Otra regla popular dice “a veces menos es mas”. Tal vez, con el diario del lunes de octubre siguiente a las elecciones alguno comience a escribir sentencias parecidas.