EDITORIAL | Autor: Redacción | 15-09-2013
Domingo de rescaca
Por suerte existe Internet para todos y para todas
Enfrentarse a la idea de que fuimos felices cuando éramos jóvenes es casi lo mismo que decir que ahora no lo somos. La vida pasando en cuadros placenteros, mientras le ganábamos al sueño y a la muerte, antes de perder contra la década ganada. Es la felicidad en ratos eternos del ebrio, para luego despertar con resaca.
La resaca es un cuadro de malestar general que se padece tras un consumo excesivo de bebidas alcohólicas, aunque no lo suficiente para llegar al coma profundo y a la subsiguiente muerte por depresión respiratoria. El término médico es veisalgia.
Aquí propongo algunas curas simples, en caso de que usted también la padezca: pan tostado y un jugo de naranja: una taza de café negro, fruta fresca y caldo de verduras. Hacer ejercicios al aire libre, moderados. Dormir todo lo que se pueda. Todo esto, en caso de que usted padezca una resaca dominguera porque se excedió el sábado.
Ahora, si lo que usted tiene es una resaca de la vida, porque se excedió en los festejos de la revolución productiva y el salariazo, o porque brindó demasiado el día que le dijeron que la casa estaba en orden o, simplemente, se la pasó descorchando buen vino en toda esta década ganada, le diré que allí la cosa se pone más difícil: le queda poco para festejar y la resaca le va a durar un tiempo largo.
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