EDITORIAL | Autor: Redacción | 27-09-2013
Errores del crecimiento
Asà es imposible
Mario Vargas Llosa dice que "los seres humanos no pueden vivir sin ficciones -mentiras que parecen verdades y verdades que parecen mentiras-". Lo mismo ocurre con las ideas económicas. A medida que el ciclo de polÃticas monetarias y fiscales expansivas con atraso cambiario va encontrando su lÃmite, se abre una ventana para poder entender las verdaderas implicancias de algunas de las medidas económicas que el kirchnerismo ha llevado adelante.
Con la economía sin crecimiento, la inversión colapsada, la inflación acelerándose, el déficit fiscal agigantándose, las provincias nuevamente en la necesidad de emitir "patacones", las economías regionales ahogadas por una inflación de costos que parece sin fin, la demanda laboral en caída libre, exportaciones e importaciones en baja y los ahorros de la gente acuartelados en un corralito de pesos que los licúa sin misericordia, es necesario entender los principios, básicos, de manual.
\r\nLa inflación, sin dudas, está relacionada con la creación de dinero. No es como se piensa oficialmente desde el gobierno que obedece a restricciones de oferta, empresarios inescrupulosos o aumentos salariales desmedidos, factores todos que luego de permanecer dormidos o descoordinados por 15 años, repentinamente se combinaron en los últimos tiempos para complicarle la vida al Gobierno. Al contrastar esta hipótesis con la realidad vemos que desde la asunción de Cristina Kirchner, cuando la inflación se disparó, la cantidad de dinero subió 120% y los precios un 130 por ciento. Esto no debiera sorprender: esta relación entre dinero y precios esta teórica y empíricamente probada. Podríamos sintetizar, de manual.
\r\nCon una economía en espiral hacia el colapso. Con empresarios estáticos esperando el fin de este proceso eleccionario para mover fichas, con políticos inescrupulosos que se cambian de bando en el medio de una sesión del Congreso es imposible crecer. En todo caso, el crecimiento es una consecuencia natural de lo que hacemos. Y si alimentamos la cosa tan mal, seguro que creceremos peor.