Fijate la fecha, del lado de atrás

¿La felicidad? ¡ja, ja,ja,ja!

En pocos días, un héroe se puede convertir en villano. Una futura heroína en una truchadora de carnés de conducir, o coimera. Y un intendente en un supermán que asiste a ocho actos diarios, da nueve conferencias de prensa en cinco hora, juega un partido de fútubol de beneficencia y, de paso, colabora para reparar las goteras de una escuelita de la periferia ¡Esto es Hollywood! no, este es el año pre electoral.

Cada uno se juega la cuerda que le queda y nos están friendo en aceite mezcla. Mezcla de aumentos irracionales, como los de Camuzzi, o desproporcionados, como los de OSSE, que como le sobra la plata se decide a hacer caridad en las escuelas provinciales. El mes pasado era feliz cuando me llegaba la factura de gas; sólo que en aquella época no lo sabía ¿qué bien que estábamos cuando estábamos mal!

Ahora, en otro plano, está de moda burlarse del finadito Julio Grondona porque manejó mucho poder por muchos años. Tal vez en un lustro, o menos, estemos diciendo que pena que nos dejó tan pronto Don Julio, nos haría tanta falta...

Mi amigo, como mi cuñada, tiene terribles problemas existenciales. Necesita de un psicólogo para tratar su complejo eterno de inferioridad y un cura para suavizar el alma. Aún no sabemos en qué orden, o si necesitan de los dos a la vez. Como sea, la suma infinitésima de instantes de felicidad darán por resultado una vida aceptablemente feliz. En todo caso, disfruto de compartir este instante seudo reflexivo con ustedes mientras trato que se prolongue su fecha de vencimiento.