EDITORIAL | Autor: Lic. José Luis Dranuta | 16-05-2015
El fútbol, como el blues, ya no serán lo mismo
La sanción a Boca y la muerte de BB King
Tarde triste para los bosteros amantes del blues. Quedan pocas cosas en la tierra que puedan empardar una buena guitarra, un buen blues o un gran partido de fútbol. La pizza, la cerveza o las mujeres, puede ser que tengan su encanto, pero el sonido del apagado BB King o de la Bombonera latiendo son únicos. Con las sanción que se va a comer la cancha de boca, con el último acorde del Ãdolo, parece que todo ha concluido.
El lenguaje musical de BB King tuvo las dosis exactas de música rural y sonido eléctrico del rock and roll. Diez años despues explotaría ese sonido en todo el país, dejando a King naturalmente en el lugar de padre del blues eléctrico. Todos los grandes guitarristas del planeta reconocieron la influencia de BB King en su forma de tocar y particularmente los argentinos.
Tras el escándalo del jueves, la FIFA urgió al organismo regional a definir la sanción disciplinaria hoy mismo y no dilatar una decisión crucial para el torneo continental y que deberá ser -según señalaron fuentes del organismo internacional a Infobae- "ejemplificadora". Es por eso que las máximas autoridades de la Conmebol decidieron reunirse de urgencia mañana para resolver el proceso disciplinario cuanto antes. Minutos antes de las 14, Boca presentó su descargo frente al comité.
Así las cosas, la muerte y la suspensión parecen ser la única salida. La tarde cae y la nostalgia gana por goleada. La noche nos pilla con un comunicado que dice que Boca deberá pagar 200.000 dólares de multa. No podrá jugar por cuatro partidos de local con público, es decir, deberá hacerlo a puertas cerradas. No podrá llevar público por cuatro partidos internacionales de visitante. Ah, el partido, no lo perdió. River en cuartos, ganando en el escritorio lo que no había ganado aún en el campo de juego. Todo es una farsa, “Every Day I Have the Blues”, como rezaba el famoso tema del famoso negro blusero. La vida sigue, pero nada será igual.