EDITORIAL | Autor: Lic. José Luis Dranuta | 01-06-2015
FIFA, corrupción y después
Blatter y el escándalo
El miércoles el mundo del fútbol amaneció agitado, convulsionado e incrédulo. Dirigentes de la FIFA se retiraban en carácter de detenidos de lujosos hoteles de Zurich, Suiza, a 48 horas de las elecciones presidenciales en el máximo ente del fútbol mundial
El FBI hizo de las suyas, Estados Unidos hizo de las suyas. Otra vez. Como tantas veces contra sus necesarios enemigos para alimentar la industria bélica. Esta vez, fueron por un gran imperio: el fútbol. Uno de los cinco negocios más grandes del mundo, que comparte podio con otros ilegales como la venta de armas, el narcotráfico y la prostitución.
“Un imperio ataca a otro”. Una idea que rondó por alguna cabeza. Pero el imperio de la pelota y su mandamás se mantuvieron de pie pese a la tormenta y se agazapa para contra atacar.
Porque por el momento, y con la defensa de Vladimir Putin, defendió con éxito a Rusia como sede de la Copa del Mundo 2018 y, por ahora, sostiene a Qatar como anfitrión en 2022.
Tal vez sea ese el gran objetivo de la ofensiva lanzada por el Departamento de Justicia de Estados Unidos, por Washington: quitarle a los qataríes la sede de la 22° Copa del Mundo y que se la disputen los poderosos históricos, como Estados Unidos, Inglaterra (inventores del juego que no organizan el Mundial desde 1966) o España, todos países, cuyas federaciones no logran captar la cantidad de votos necesaria para volver a ser parte interesada del negocio número uno del deporte mundial.
Es que si no ¿cómo se le quita el Mundial a Qatar? ¿Con plata? A Qatar le sobra dinero. No es tentador para jeque alguno recibir un suculento cheque a manera de indemnización. Hace falta una mejor idea, más aún, cuando la FIFA ya oficializó que en 2022 el torneo se jugará entre noviembre y diciembre, hecho único en la historia del certamen.
El FBI dice investigar casos de corrupción que datan desde hace veinte años. Hace 21 Estados Unidos fue sede de la Copa del Mundo. Pero, al parecer, no existía sobres repletos de dinero por aquellos días.
Nada es demasiado claro. Por cada respuesta surgen mil preguntas. Más allá de lo estrictamente burocrático ¿Qué tan legítimo es el poder de Blatter en la FIFA tras ser apoyado por África y Asia y tener en contra a América y Europa?
UEFA y Conmebol, federaciones campeonas de las veinte ediciones de la Copa del Mundo y principales dueños de las ligas a nivel global en lo deportivo, derechos de televisión, venta de entradas, patrocinadores y peso político, se declararon abiertamente en contra del suizo, que comienza su quinto mandato. ¿Qué tan bien navegará el Barco FIFA al que prometió llevar a “buen puerto fuerte y robusta”?
“La FIFA no está manejada por nenes de pecho”, una certeza que ronda por miles de cabezas. Blatter vaticinó “más problemas para el fútbol”.
El Imperio fue atacado. Próximamente, volveremos a ver “El Imperio Contraataca”, pero con un Darth Vader futbolero.