Bolsa de gatos

Todos los perdedores de despellejan entre sí

Gustavo Pulti debe hacer un fuerte replanteo si quiere revertir la situación porque esta elección dejó un tablero político con solo seis candidatos para octubre. El triunfo de Carlos Arroyo era impensado para propios y extraños. Cinco encuestas decían que Gustavo Pulti iba a ser el más votado en la elección del último domingo. Las cinco, además, lo ubicaban por encima de los 35 puntos. Nadie creía que Arroyo pudiese ser el ganador de las Paso. Arroyo es un actor importante de la política marplatense. Sin embargo, jamás fue un protagonista. En la elección de 2011, la lista del Frente Popular sacó 37 mil votos en las Paso (una de las tres listas la encabezaba Arroyo, que ganó la interna) y 30 mil en la general. Dos años después, ya con la lista corta de la Agrupación Atlántica, obtuvo 50 mil votos en agosto y 57 mil en octubre. Ahora logró algo impensado: 106 mil habitantes de General Pueyrredon lo votaron. Prácticamente duplicó el apoyo recibido hace solo dos años. 

Dentro de Acción Marplatense sostienen que esto es irreversible, que a Pulti lo aislaron de la realidad, o mejor dicho, le crearon un microclima. Sus colaboradores más cercanos serrucharon pisos a diestra y siniestra y no dejaron acercar a personas probas, con ganas de trabajar en pos de una ciudad mejor. En su reemplazo estuvieron las caras de siempre, mostrando por Twitter y Facebook una actividad frenética, a veces sin sustento, otras sin fundamento. Un vecino del barrio Las Heras nos decía "¿para qué quiero saber que hoy por la mañana se hizo un cordón cuneta, con fotos y texto, en el muro de mi ´Face´? Ese es su laburo; yo no ando subiendo mi laburo diario". Otro vecina, del barrio Villa Lourdes, se quejaba de que habían pintado las rayas blancas del cruce peatonal encima de un bache que tiene más de 6 años. Hay plata para pintura pero no para tapar el agujero, reflexionaba".

Todos los municipales de carrera, que en su momento se sintieron maltratados por los políticos (Alveolite y Mónica Sanmartino encabezan el ranking) sienten que en este momento les pueden "devolver las gentilezas" a los funcionarios. El escenario no es el más prometedor. Como sea, el daño ya está hecho. Nada, de aquí en adelante, va a ser lo mismo. Con un futuro presidente que se rajó unos días a Italia "extenuado" por la campaña, sin importarle que media provincia suya estaba inundada, hace razonable que los secretarios municipales se tomen vacaciones en períodos laborales, porque se las "adeudan". Al fin y al cabo el verdadero adeudado, "el ciudadano" ya votó, y encima, no los votó en su gran mayoría. Ahora que se jodan y esperen.

Pero ¡Cuidado! La memoria común, activa, la que activa los sentidos de la reflexión y el sentido común (valgan todas las redundancias) está más lúcida que lo corriente, y los marplatenses, que ya demostraron no ser mediocres, como decía Russak, se las van a seguir cobrando.