EDITORIAL | Autor: Lic. José Luis Dranuta | 10-09-2015
Sarmiento y la pereza intelectual del siglo XXI
Dale no más
No todos los dÃas se nos ocurren cosas brillantes. A veces, y esto es más común de lo que pensamos, nuestra vida se torna monocorde, mediocre. Gracias a nuestra capacidad de re inventarnos es que intentamos escaparnos del hastÃo, del odio y del aturdimiento que produce tanto ruido polÃtico innecesario, inmerecido, para una clase de argentinos, la inmensa mayorÃa, que anhelamos un futuro mejor para nosotros y los nuestros, trabajamos a diario para lograrlo, y soportamos estoicamente a quiénes nos gobiernan entre la falta de talento y la corrupción desmedida. No existe el poco corrupto o muy corrupto: se es lo que se es. Este gobierno, señoras y señores, ha demostrado plenamente que es corrupto y que viola leyes. A veces el hastÃo nos tienta a dejar de hablar de lo que se ha hecho cotidiano y molesta tanto como lastima. Pero vencemos la pereza intelectual denunciando. Sarmiento, ese revolucionario de la pluma, hacÃa lo mismo. Una buena forma de seguir su legado es sintonizarnos en su concepción de Nación.
A más de 200 años de su nacimiento, la vigencia del legado de Domingo Faustino Sarmiento permanece casi intacto si de progreso, república democrática y excelencia educativa para todos los niveles se trata. "Sarmiento es un hombre con mucha mística que vivió en el siglo XIX y fue un visionario del siglo XXI. Asombra la vigencia de su pensamiento y de su conducta ética", resume la historiadora Felicitas Luna al referirse al "maestro de América", que hoy será recordado con distintas ceremonias en todo el país, porque mañana, craso error, no se trabaja en las escuelas.
Historiadores, políticos, sociólogos y escritores coinciden en pleno siglo XIX en destacar la figura de Sarmiento, que en su larga vida -murió los 77 años- brindó al país ideas modernas sobre infraestructura y sobre educación, pilares para el desarrollo del país. Para el historiador Rodolfo Terragno, "hay que hacer como los cartoneros, que revuelven la basura para encontrar lo mejor. El basurero de la Historia está lleno vicios y pecados de los próceres. Pero, en el caso de Sarmiento, sólo cabe sacar de la bolsa su monumental y vigente concepto de la educación popular".
El ejemplo del hoy, manchado y menoscabado, de la educación pública, llena de bolsones de mano de obra semi desocupada, profesores y maestros poco capacitados, escuelas fantasmas con poca estructura edilicia y pocos recursos contrasta dramáticamente con la realidad de otra mayoría: docentes comprometidos y soñadores, padres qu quieren lo mejor para sus hijos y gobernantes que aún deseando más no lo pueden plasmar. Ni todo tan podrido ni todo tan siniestro: simplemente es la pereza intelectual, que nos ha invadido, como un virus, y nos genera auto compasión, desprecio por la cultura del esfuerzo y la negación de reconocer a la educación como la única y legítima herramienta transformadora del ser humano.
Feliz día no laboralble del maestro para todos y todas, muy feliz día para aquellos que desean hacer su tarea con dedicación, afecto y compromiso.