EDITORIAL | Autor: Lic. Mirtha Cáffaro | 20-10-2015
La pobreza como fábrica de poder
El miedo a votar libremente
En un paÃs en el que la corrupción es moneda corriente, ya pasa inadvertido el clientelismo, la prebenda y la categorÃa de rehén. Cómo se construyó ese poder y se pasó de la cultura del trabajo a los planes sociales. ¿Y ahora qué?
Si tenemos en cuenta que la pobreza afecta a 1 de cada 4 y que la responsabilidad es de todos, sería mucho más fácil iniciar un camino en conjunto. Porque mirar al pobre “en directo” o “por tv”, solo por usar frases hechas, debería avergonzar a cada uno. Por acción u omisión, por complicidad o por ser testigos silenciosos de los hechos.
No puedo dejar de pensar en la educación en nuestro país, en especial me refiero a la educación pública, con sus carencias edilicias, su caída en picada en estándares de calidad deja a las claras el descenso social.
Pero hoy, quiero compartir una mirada más general. Mirar las relaciones entre el poder y el pueblo; o, los gobernantes con sus electores.
En un país en el que la corrupción es moneda corriente, ya pasa inadvertido el clientelismo, la prebenda y la categoría de rehén.
El clientelismo, según la Real Academia Española, es el sistema de protección y amparo con que los poderosos patrocinan a quienes se acogen a ellos a cambio de su sumisión y de sus servicios.
Es la tendencia a favorecer, sin la debida justificación, a determinadas personas, organizaciones, partidos políticos, entre otros, para lograr su apoyo.
El sistema basado en la “prebenda”, que según la RAE, es el empleo o ministerio lucrativo y poco trabajoso. Alude a la relación entre el empleo o encargo en el que se gana mucho dinero y se trabaja poco.
Por caso, tenemos un ejemplo “vivito y coleando” en el norte del país, documentado por diariohoy.net de Misiones.
Se trata del candidato kirchnerista Antonio Benítez que se encuentra repartiendo el “Bono incentivo del voto”, en Puerto Esperanza. Benítez es postulante del Partido Agrario y Social, una de las colectoras oficiales en Misiones y que apoya al gobernador Maurice Closs.
Él asegura que si resulta electo intendente el próximo domingo, se sortearán importantes premios entre quienes hayan adquirido el bono. Entre ellos, 10 terrenos con casa, un ciclomotor de 110, una moto, y 8 celulares de alta gama. Habrá que esperar el sorteo nocturno de la Tómbola Misionera del 31 de octubre para saber quiénes serán los afortunados.
Benítez es postulante del Partido Agrario y Social, una de las colectoras oficiales en Misiones y que apoya al gobernador Maurice Closs.
Pero esta última década ganada ha sembrado por doquier planes “trabajar” y hoy muchos se preguntan qué pasará si no gana Scioli. El miedo a perder el plan juega un papel decisivo a la hora de elegir.
Pero quién querría generar un clima de caos e inseguridad mayor quitando los planes. Todos los candidatos ya han explicado pero queremos puntualizar el mensaje de cara al domingo próximo.
Los planes no se van a sacar pero van a coexistir con capacitación para la inserción laboral. En cuanto a los incentivos para generar empleos, en el caso de Massa dejó bien en claro que los empleadores no pagarán cargas sociales por cada trabajador con plan que incorpore.
En un modelo de país nuevo es esencial transparentar la ética del estado e la administración.
Los gobernantes deben actuar de manera ejemplar. La verdadera vocación de servicio debe ser el motor del engranaje.
La recuperación de los valores se debe producir en un país unificado, verdaderamente federal.
Los empresarios, los políticos y funcionarios, son los que deberían sentir más vergüenza ante la pobreza y tener conciencia de lo imperioso que es contruir una Argentina que diga “Nunca más” a la corrupción.