EDITORIAL | Autor: redacción | 26-04-2016
Con el tablero de control zafaron del temporal
Se acabó la joda
El interventor golpeó la mesa y dijo "Señores, se acabó la joda. Hay que gobernar". Entonces los pecados menores, como acomodar a la mujer de uno en un puesto para el que no está preparada (más si uno es el intendente) o la amiga de chanchuyos y desfalcos como secretaria, pasaron a ser pecados veniales. Sobretodo si ese área es educación. Ya sabemos que a la derecha le importa nada la educación pública: "tilinguerÃas de conservador" dirÃa nuestro escritor dilecto MartÃn Caparrós. Asà las cosas, Crovetto consiguió un poco de aire para seguir, Arroyo un mes de impasse y todos nosotros un poco más de incertidumbre, ahora rubricada por el interventor, al que se le escuchó decir que necesita un mes para interiorizarse de los problemas. Desensillá y tomate otro mate, porque la cosa va para largo, por más que el interventor venga con un "tablero de control bajo el brazo".
Ahora nos cuentan que con el tablero de control vamos a arreglar la ciudad. Por si usted no lo sabe, los tableros de control generados están diseñados para generar el máximo impacto visual posible en un formato optimizado para lograr captar la información rápidamente, por medio de una combinación de tablas, gráficos, reglas de medición, y otros indicadores gráficos ¿Con eso se gobierna una ciudad? No lo sabemos, pero la técnica es prometedora, el término es canchero y le metemos un poco de marketing a este gobierno de viejos vetustos, que, ciento cincuenta días después de asumir, muestran que son unos fracasados. ¡Y que se enciendan las luces de colores del tablero!