EDITORIAL | Autor: redacción | 19-04-2017
Los ladrones y los bancos
Son lo mismo
Ir a un banco y tratar de entender quién es el ladrón es un hecho cada dÃa más difÃcil. A las absurdas retenciones e impuestos que cobra por cuenta y orden del gobierno, sea el impuesto al crédito y débito, sancionado en emergencia por seis meses en 2001 y aún vigente, hasta las retenciones de IIBB, ganancias e IVA, se suman los costos financieros y comisiones que rozan la ilegalidad. Para más ejemplo, cualquier préstamo otorgado por un banco es canalizado obligatoriamente en una caja de ahorro que genera gastos y comisiones encubiertas muy por encima del costo real del préstamo que se está amortizando. Sin ningún lugar para manifestar la queja y que la misma sea canalizada, con un alto Ãndice de complicidad del gobierno con la banca, los ciudadanos son virtualmente robados permanentemente por los bancos. No existe ladrón, sobre la faz de toda la Argentina, que sea capaz de robarle a un banco ni el uno por mil de lo que el banco le roba a toda la sociedad a diario. Y asà vamos.
Las comisiones bancarias son cantidades, arbitrarias, negociadas, fijas o porcentuales, que cobra el banco o entidad financiera por la realización de transacciones, emisión de documentos, contratos, saldos negativos así como de mantenimiento, entre otras. Los bancos cobran por una gran cantidad de conceptos las llamadas comisiones bancarias. Las comisiones bancarias pueden ser libres y por lo tanto fijadas arbitrariamente por las entidades bancarias, negociadas con los clientes o fijas si se establecen por organismos de control o supervisióno sea el Banco Central.
Cada vez que un banco te roba (cobrándote lo indebido) en esta trampa legal que son las transacciones, hay un gobierno nacional, provincial y municipal, cómplice que permite el hecho. A no olvidarlo, no se trata de década K o de Cambienos. Nos siguen robando y nadie desde el gobierno está dispuesto a impedirlo.