EDITORIAL | Autor: redacción | 10-05-2017
Quemaron a un hombre e hicieron un pacto de silencio
Lo mataron, lo quemaron..."ta´ pa colgarlo" se escucha una voz en off. Allí no se sabe si lo que querían era colgar el cadaver, como se hacía en el medioevo, o "colgar" las imágenes en las redes sociales. Entoces, en el video se escucha la prohibición expresa de que nadie publique nada de lo que están filmando o fotografiando en las redes sociales. “Nadie suba ninguna foto”, ordena el que pretende ser el jefe de los ajusticiadores. Acaban de cometer un crimen grupal, cual "Fuenteovejuna", y en un pacto de silencio pretenden que nadie quede pegado. Una voz femenina que imaginamos de una señora baja, morocha y regordeta se oye aclarando que esto no es un asesinato, es "justicia por nuestros hijos". Ahora los malvivientes tienen las redes sociales para retratar su miseria y todos la podemos ver por un canal de youtube. El "homo sapiens sapiens" diría el Doctor Rosler, es una definición un tanto parcial de la raza humana.
En la noche del domingo para el lunes varios indivíduos mataron a Alderete (25), quien se lo presumía como el asesino de Francisco Chávez (15) y Brian Falcatto (17). Lo mataron y lo quemaron, mientras otros partícipes necesarios pedían exhibir el cuerpo, ya sea físicamente o en las redes sociales. Por la muerte de este fueron detenidos tres de las cinco personas buscadas en la causa que investigan los sucesos del último fin de semana. En el barrio "El Martillo" todos saben y nadie habla. La justicia de San La Muerte llegó antes que el derecho positivo.